Buongiorno Milano! Llegamos una vez más al destino favorito de muchos, donde el arte, comida y peculiar estilo arropan a todas las personas que llegan, en esta ocasión al desfile de la colección de hombre Fall Winter 24 de Gucci.
En lo que es su segunda colección presentada, Sabato de Sano poco a poco nos adentra a su dirección creativa apoyada por los códigos únicos y hereditarios de la casa de lujo, a través de la fuerte raíz “Ancora” donde Sabato cuenta una narrativa sartorial a través de cortes sofisticados y looks glamurosos expresados en forma de looks clásicos de ropa masculina. Los looks se pavonearon por las pasarelas instaladas en la Fonderia Carlo Macchi de Milán con un escenario definido por vigas de metal y un suelo de cemento liso con una iluminación brillante, trasladando y replicando el mismo escenario, banda sonora y vibras de su primer desfile e incluso reflejando la version “men” de algunos de los looks.
57 looks fueron suficientes para confirmar la nueva era “effortless chic” de Gucci, donde las siluetas sofisticadas crearon un efecto elegante en cada prenda. Los cortes rectos en la sastrería y la manipulación de telas aportaban un efecto “arrugado” a los trajes pero a la vez elegantemente confeccionados. Guantes de cuero, blazers cruzados, mocasines clásicos y bolsos tipo tote e incluso mochilas fueron combinados y estilizados de la mejor manera, en la que el la sofisticación llegó a su punto exacto. Desde el tono 'Gucci Rosso' característico de De Sarno hasta tonalidades más vivas como verde o azul inundaron la pasarela.
A pesar de la ausencia de la opulencia apreciada por muchos seguidores de la era anterior de Gucci, la colección aún logró destacarse a través de elementos como pantalones de mezclilla, chalecos, abrigos y gargantillas estilo corbata. En estos, destellantes detalles adornados mayormente con cristales añadieron un toque divertido, mientras que la presentación en la pasarela concluyó con estilos más tradicionales de esmoquin monocromático, proporcionando un contraste equilibrado entre la extravagancia contemporánea y la elegancia clásica.
"Es una historia de alegría de vivir, de pasión, de humanidad, de personas, de la vida real, de glamour irreverente, de provocación, de confianza, de sencillez, de sentimientos y emociones inmediatas. , de un tipo específico de arte, de palabras." De Sarno detalla en la nota de prensa.
La combinación de la maestría italiana con un toque de irreverencia sugiere una búsqueda deliberada de la marca por mantenerse relevante y emocionante en la escena de la moda. Este enfoque equilibrado entre la tradición y la audacia crea un mensaje claro: la moda puede ser una expresión artística que evoluciona sin perder su esencia. "Ancora" no solo celebra el legado de Gucci, sino que también apunta a un futuro vibrante y ecléctico, capturando la atención de aquellos que buscan tanto la sofisticación clásica como la originalidad contemporánea en su vestimenta.
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