El documental sobre la vida de Brooke Shields vuelve a poner a Hollywood contra las cuerdas.
Esta semana han salido a la luz las primeras imágenes que conforman el tráiler del documental Pretty Baby: Brooke Shields, que se estrenará en la plataforma Hulu el día 3 de abril, sobre la vida personal y la carrera profesional de la reconocida actriz neoyorquina. En este adelanto, podemos ver las herramientas seleccionadas por la directora, Lana Wilson, para contarnos esta historia. Según lo que hemos podido ver, las imágenes de archivo y las entrevistas en programas de televisión ya inexistentes, son el grueso del material visual de este trabajo, pero además, también cuenta con el relato en primera persona de la actriz, que, en un escenario bastante neutro, narra los sucesos que se han incluido en el proyecto, acompañados de las sensaciones y reflexiones de la propia Shields. Por su parte, también aparecen otros testimonios de personajes públicos que se han dedicado a la industria desde la infancia como la también actriz, Drew Barrymore.
Los principales temas que se tratarán son la sexualización y la fama a una temprana edad, la concepción de la belleza como característica incompatible con el talento y el esfuerzo, también los estándares de belleza inalcanzables, la explotación laboral de niños en el cine o la respuesta del sistema patriarcal, dentro del panorama cinemático, ante el feminismo…
Todo a través de las vivencias de la actriz estadounidense, que declara estar verdaderamente asombrada de haber sobrevivido a todo esto, ya que solo se trataba de una niña en un mundo de adultos. No obstante, y como pueden imaginar no es un caso aislado, como bien narran en el tráiler del documental, las situaciones que le sucedieron a Brooke Shields no tienen que ver con ella solo como individuo, sino que es un tema que afecta a todas las mujeres. Y las que han conseguido sortear comentarios, comportamientos o abusos machistas, han sido sustituidas por niñas o jóvenes vulnerables sin la información o la posición de poder necesaria para evitar ser objeto de miradas impuras, sucias, miserables. Ciertamente, Shields es la protagonista de este proyecto, pero las invitadas en su misma situación exponen, de nuevo, la magnitud del ‘me too’ hollywoodiense. Por tanto, podríamos hablar de Pretty Baby: en este caso, Brooke Shields.