ALEXANDER SKARSGÅRD es un biker gay con látigo en PILLION

Ya era hora de que alguien hiciera una peli sobre sumisión, cuero, y daddy issues en clave queer —y que no diese vergüenza ajena. Se llama Pillion, la protagoniza Alexander Skarsgård, y no, no es una broma de Twitter.

La historia va así: Colin (Henry Melling, ex-Dudley Dursley y cada vez más interesante), es un alma pasivo-agresiva atrapada en su rutina de suburbio gris. Hasta que aparece Ray (Skarsgård en su fase dom de catálogo), el líder de un club de moteros que parece sacado de una portada de Tom of Finland, y le cambia la vida. Traducción: le cambia el outfit, la agenda sexual y el concepto de intimidad para siempre.

“Ray arranca a Colin de su vida aburrida y lo lanza a un mundo de moteros queer, kink y rituales que huelen a cuero y redención sexual”, dice la sinopsis. “Pero a medida que Colin se adentra en este universo de reglas, sumisión y control, empieza a preguntarse si ha encontrado su lugar o simplemente ha cambiado una jaula por otra”.

Hasta ahora, solo había una imagen promocional: Skarsgård caminando en cuero, con Melling mirándolo como si estuviera viendo a Jesús, pero con abdominales. Ahora tenemos más: miradas intensas, moteles sudorosos, y Melling abrazando al perro con más emoción que a cualquier humano. Prioridades claras.

Basada en la novela Box Hill de Adam Mars-Jones, Pillion también incluye a Douglas Hodge, Lesley Sharp, Anthony Welsh, y —plot twist— a Jake Shears (sí, el de Scissor Sisters) como Kevin, otro sub. Porque no hay revolución queer sin música pop de fondo.

La película se estrena el 28 de noviembre en cines del Reino Unido.