La actriz piensa que el fantasma de la despampanante ambición rubia la persiguió con el fin de ayudarla en su papel.
Según Reuters, la actriz de 34 años dijo recientemente a los periodistas durante el estreno de Blonde en el Festival de Cine de Venecia que la película biográfica de Marilyn Monroe también recibió algunos consejos de un productor no acreditado, concretamente el fantasma del propio icono de Hollywood.
"Creo que estaba muy cerca de nosotros. Estaba con nosotros", dijo de Armas. Sin embargo, también añadió que la estrella nunca dudó en protestar por ciertas decisiones, "tirando cosas de la pared a veces y enfadándose si no le gustaba algo".
"Quizá esto suene muy místico, pero es cierto. Todos lo sentimos", continuó, antes de que el director Andrew Dominik corroborara su afirmación diciendo que hubo momentos en los que "definitivamente tomó elementos de ser como una sesión de espiritismo". Y lo que es más espeluznante, también reveló que el rodaje comenzó en el aniversario de la muerte de Monroe, y que las escenas iniciales se rodaron en su antiguo apartamento y la escena de la muerte tuvo lugar en la habitación real donde sufrió la sobredosis en 1962.
"Ella era todo lo que pensaba, era todo lo que soñaba, era todo lo que podía hablar", continuó la nominada al Globo de Oro. "Ella estaba conmigo y era hermoso. Quizá esto suene muy místico, pero es cierto. Todos lo sentimos".
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