El nuevo álbum de Lady Gaga vino de una fuente inesperada. En su portada de Vogue, la cantante reveló que su séptimo álbum de estudio saldrá a la venta en febrero, y resulta que el disco -al que por ahora apoda LG7- fue una petición de su prometido, Michael Polansky.
“Michael es la persona que me dijo que hiciera un nuevo disco de pop”, recuerda. “Me dijo: 'Nena. Te quiero. Tienes que hacer música pop’”.
Polansky también se abrió sobre el deseo de Gaga de hacer su nuevo álbum, señalando que es “más feliz” mientras crea. “Como cualquiera haría por la persona que ama, la animé a que se dejara llevar por la alegría”, dijo a Vogue. “En la gira Chromatica, vi un fuego en ella; quería ayudarla a mantenerlo vivo todo el tiempo y simplemente empezar a hacer música que la hiciera feliz”.
Gaga no dio muchos detalles sobre el álbum, pero interpretó una canción que el entrevistador describió como “intensa y siniestra, un tema de la vieja escuela de Gaga, inquietante pero también alegre”. Como confirmó el 3 de septiembre, el primer single de LG7 se publicará en octubre.
Gaga sí dijo que su mentalidad durante el proceso creativo estaba en marcado contraste con cuando grabó su álbum Chromatica de 2020, que describió como “un momento absolutamente horrible” para su salud mental. “Siento que este nuevo álbum, de muchas maneras, es sobre ese tiempo, pero desde un lugar de felicidad en lugar de miseria. Ahora, Michael y yo estamos realmente emocionados de organizar nuestras vidas -y nuestro matrimonio- en torno a nuestra producción creativa como pareja”.
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