¡Stand by me! El final de THE LAST OF US

El último capítulo de The Last of Us deja a la audiencia sin misterio central, pero con nuevos conflictos para la segunda temporada.

La última entrega de la primera temporada de The Last of Us curiosamente comienza por el principio; nos muestran el inicio del misterio que rodea a nuestra protagonista. Sentimos la angustia de la madre de Ellie huyendo de una persona contagiada mientras estaba de parto. Por tanto, la audiencia por fin pudo comprender la inmunidad de la joven ante el hongo. Pero ya no se trataba de eso.

Junto con su compañero y amigo Joel, la aventura o, más bien, desventura de llegar al nuevo campamento de los ‘luciérnaga’ seguía siendo el objetivo. Pensaban que podrían ayudarles y encontrar una cura estudiando las propiedades o agentes que sobreviven en el cuerpo de Ellie. No obstante, tras reunirse con el grupo de Marlene, desaparece toda la intriga que causaba la serie y aparece otro anzuelo: una encrucijada; Joel se ve en la postura de tomar una decisión importante para el mundo. Tuvo algunos minutos para reflexionar sobre la cuestión y lo que siguió fue ese sonido que hacen los cartuchos contra el suelo. Uno tras otro.

Ellie despierta unas horas más tarde, no había sido consciente de toda la violencia que habían absorbido los cuerpos de aquellos hombres y mujeres. No conocía las intenciones o consecuencias de las decisiones que tomaron los adultos que la rodeaban ese día. Ignoraba totalmente su condición y, sin embargo, los demás personajes, amparándose en el delicado arco de lo correcto, dictaminaron su voluntad sin tener en cuenta a la protagonista.

Probablemente, Ellie descubrirá estos hechos en la segunda temporada que ya ha confirmado la plataforma HBO Max. Mientras tanto, la escena final de The Last of Us nos ha dejado con la sensación de que, incluso apocalípticamente, se puede empezar de cero. Eso es lo que nos transmiten Joel y Ellie volviendo a casa con la intención de construir una vida en una comunidad reducida y controlada. Este es el deseo del protagonista: una existencia que pueda acercarse lo máximo a la normalidad para una chica que sería del agrado de su hija Sarah.

Para cerrar el episodio, Joel anima a su compañera asegurándole que encontrará un propósito que le devuelva la ilusión, que se sentirá feliz de nuevo. Esto es lo único que puede prometer porque es lo que le sucedió cuando se encontró con Ellie.