GLENN MARTENS sacude MARGIELA: (Des)estructurando lo básico

Glenn Martens debutó en Maison Margiela y, spoiler: lo destrozó (en el mejor sentido posible). Porque cuando tienes a alguien con su visión, talento y energía creativa al frente, lo mínimo que puedes esperar es un desfile que te haga replantear qué significa "alta costura".

Desde el minuto uno, el desfile —en el mismo lugar donde Martin Margiela presentó su último show en 2009— se sintió como una carta de amor a los clásicos de la maison, pero con una actualización que grita 2025. ¿Coats como bañados en goma? Check. ¿Cueros con plumas y desgastes imposibles? También. ¿Satinados futuristas con brillo de otro universo? Por supuesto. Y por si hacía falta un guiño más al ADN Margiela: pantalones blancos pintados, salpicados ahora con colores vivos, como si el pasado hubiera chocado con el presente en una rave arty.

Y aunque Margiela ya se mueve hacia un universo más mainstream (más allá de los accesorios), tener a un nombre fuerte marcando el camino no solo es buena estrategia: es necesario. Glenn Martens es ese nombre.