Cuando a principios de este mes se anunció que la reina de Diet Coke, Kate Moss, ocuparía finalmente su merecido lugar en el trono de Coca-Cola como directora creativa, el mundo enmudeció durante unos segundos, pero se sucedieron de gritos bien sonoros alcanzaron más decibelios de los permitidos.
Moss que ha sido consumidora habitual de la bebida ha conseguido que la marca se fijase en ella tras estar el trono vacante desde que Marc Jacobs decidió centrarse en otros menesteres. Ella ilusionada y con muchas ganas de poner su seña comentó cuando se supo la noticia que: "Estoy deseando inspirar a los fans y celebrar el 40 aniversario de la marca con estilo", y afirmó también que "continuaría mostrando la actitud positiva de los bebedores de Coca-Cola Light".
Ayer Moss hizo lo propio y mostró su colección al mundo. La nueva reina de Diet coke organizó un evento en el 180 The Strand de Londres. Allí, desveló cuatro latas de nuevo diseño, cada una de ellas inspirada en algunos de los looks más icónicos de Moss a lo largo de los años. Por supuesto, una de esas latas incluye un motivo de leopardo, en referencia al amor de la modelo por el print animal. Por eso, para el evento, Moss optó por llevar una blusa con estampado de leopardo, que combinó con unos pantalones negros ajustados, un gran cinturón negro y unas sandalias doradas. Completó el look con un red lipstick muy acorde para la ocasión. Un rojo Coca Cola siempre sienta bien.