La catalana participará en Benidorm Fest para representar a España en Eurovisión 2022. Rigoberta Bandini es una de las artistas revelación de este año en España, sin lugar a dudas. Ya nos hizo desgañitarnos la voz con su “Perra” y al poco tiempo nos hizo bailar hasta el amanecer con “A ver qué pasa”. Ahora quiere luchar por llevarse el honor de la patria con “Ay Mamá” en Eurovision.
Con esta canción expresa con fuerza el poder de la feminidad. Conjuga elementos alegres y muy festivos con un fondo reivindicativo y emotivo con el “toque Bandini”.
Paula Ribó compuso esta canción con 23 años, mucho antes de ser madre y de iniciar su proyecto musical como Rigoberta Bandini, y por lo tanto no fue concebida como una alegoría a la maternidad sino con una trascendencia aún mayor: el poder de la feminidad. El Girl Power del SXXI. “Algunas mujeres creamos vida con nuestros cuerpos, otras no, pero de alguna manera todas somos una. Me apeteció reivindicar lo femenino desde lo que siempre se nos ha contado como masculino: irrumpir con fuerza en las calles, parar la ciudad. Cuando canto el estribillo (mamamamamaa) me vienen imágenes de mujeres de todo el mundo. Es dolor y a la vez es vida. Es refugio y a la vez es juego. Ser madre es ser el primer hogar de cada una de las personas que están vivas ahora mismo y eso me impacta”, explica Rigoberta.
Parte de su inspiración viene del famoso cuadro La libertad guiando al pueblo de Eugéne Delacroix. Una mujer con el torso desnudo siendo símbolo revolucionario como paradigma de un cambio social. “Todavía me emociona una imagen así, pudiendo ocupar las calles con nuestros cuerpos sin que fueran censurados sería un gran avance; porque no olvidemos que a día de hoy Instagram todavía elimina los posts donde salen pechos femeninos”, reflexiona la cantante.
Ahora solo hay que repetir esta proclama… ¡Rigoberta en Eurovision!
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