“El mayor proceso que he hecho para acercarme al feminismo ha sido deconstruir todo el patriarcado que llevo dentro y crear un pensamiento enfocado hacia la igualdad”
Conocer a Martina Cariddi (30 de mayo de 2001 en Madrid) es un soplo de aire fresco cuando todo huele a caduco. Es sentir una llamarada y una explosión de amor por una mujer que se hace querer en cada segundo que pasas a su lado. Pocas veces me había sentido tan cómodo en una entrevista o en una sesión de fotos. ¿El por qué? Simple. Martina no tiene esos aires de diva que suelen venir implícitos en esta profesión, es naturalidad y frescura en cada uno de los poros de su piel.
Teniendo en cuenta su edad, la madurez que demuestra es algo nada propio. Se notan demasiado las grandes dosis de terapia y un trabajo de introspección brutal. Martina es una mujer de fuertes creencias y valores que consigue que todo aquel que se cruza en su camino quiera quedarse.
Pero más allá de una larga conversación sobre feminismo, lgtbiq+, salud mental y el bullying que sufrió cuando era pequeña, hemos querido ser los primeros en conocer a Madame Nuxi, su alter ego. Porque ahí donde veis a Martina como uno de los personajes más carismáticos de la serie insignia española de Netflix, “Élite”, ahora quiere ser mucho más que actriz, quiere ser una artista. Talento no le falta. De ahí que quiera probar suerte sobre los escenarios. Nosotros en primicia hemos podido escuchar su música y… ¡que tiemble la industria musical! Madame Nuxi ha llegado.
EL ALTER EGO DE MARTINA CARIDDI
“Muchas veces lo paso mal con mis propias redes sociales”
¿Cuándo supiste que te querías dedicar a la música?
Todavía no asumo que es algo a lo que me estoy empezando a dedicar porque ha sido todo súper improvisado y siento que la vida también me ha llevado hacia ese lugar. Nunca ha sido un fin predeterminado como la actuación, que desde que tenía 8 años le decía mi madre que quería estudiar interpretación. En cambio, con la música no ha sido para nada así, de hecho, me ha costado mucho creer en mí, en que podía hacerlo. Se critica mucho hoy en día que el artista solo puede serlo en una disciplina. Si es actor, solo puede ser actor. Si eres cantante, solo puedes ser cantante y al que hace un poco de todo…
¿Has dejado la interpretación para intentar hacerte un hueco en la música o es algo que vas a aunar entre las dos cosas y vas a ir entre ambos mundos?
Me encantaría compaginar ambos mundos, todavía no sé qué va a pasar con la música. Esto lo hago por diversión porque de repente me ha flipado todo el proceso que hay detrás de una canción. No tengo ningún tipo de pretensión, sin embargo, con la interpretación tengo más que claro que me quiero dedicar a ello toda la vida. Estoy en otras partes de la profesión que estoy investigando ahora mismo también.
¿Dónde te gustaría investigar?
Me encantaría que en un futuro que me vierais dirigiendo.
¿Tienes ya tu propio proyecto en mente?
Sí, pero todavía le queda mucho.
¿Cómo viviste la sobreexposición tras “Élite”?
Fui por épocas. Al principio la viví muy bien, luego muy mal y ahora muy bien otra vez. Al principio es un shock. Te miran como si no fueras de carne y hueso y te sientes muy rara. Es bastante chocante esta sensación y sí que es verdad que durante una época me superó porque no podía salir ni un solo día a la calle sin que me reconocieran, no podía tener momentos de intimidad. Ahora estoy en un momento de mi vida en el que he recapacitado mucho sobre las cosas que me han pasado y siento que todo me ha enseñado mucho en la vida y esto me ha enseñado también un montón. Soy mucho más fuerte e intento ver solo la parte positiva de todo esto.
¿Guardas especial relación con alguno de tus compañeros de “Élite”?
Sí, con todos he tenido muy buena relación, pero ya sabéis que al final también es un poco efecto burbuja que estás ahí todos los días rodando y de repente luego las vidas se empiezan a separar cuando te vas. Llevamos vidas muy ajetreadas, pero con la que aún tengo relación ahora mismo es Carmen Arrufat. Le regale una rosa roja por San Valentín.
¿Estás preparada para que te puedan criticar por intrusismo laboral?
Tengo claro que me van a criticar. Pero un artista puede desarrollar su arte hacia donde quiera. Hoy en día se encasilla o se llega a juzgar todo mucho más rápido. No hay que colocar a las personas en un único lugar.
¿Cuál es tu estilo musical?
Trap urbano.
¿Cómo es Martina?
Soy una persona tranquila, divertida y risueña. Soy muy activa, creativa y muy imaginativa. Necesito estar todo el día creando, me gusta mucho viajar y soy muy yo cuando viajo porque me relajo y no pienso en nada. Soy muy feliz al lado de del mar y de la naturaleza.
¿Qué te gusta hacer cuando nadie te ve?
Me gusta mucho pintar, me relaja un montón y también me gusta mucho escribir. Antes de irme a la cama me gusta escribir un montón. También me encanta bailar sola, cantar en la ducha y fuera de la ducha. Me gusta mucho ordenar porque creo que me ordena también la cabeza.
¿Qué es para ti el amor?
Mi psicólogo me dijo el otro día una cosa que me gustó mucho que me decía para que una relación funcione necesita tener tres pilares soldados que son la confianza, la pasión y el futuro. Me gustó mucho porque decía que la pasión no es solo una pasión sexual, es el cuidado constante y diario a través de un respeto y de una escucha y de una comunicación con el compañero. La confianza se genera a través del tiempo en el que tú confías plenamente en el otro y no dudas. Agradezco un montón la tranquilidad de estar en una relación en la que sabes que no va a pasar nada malo porque confías y estás tranquilo. Y por fin el futuro que, aunque sea un futuro cercano, sabes que te ves haciéndote un viaje o cualquier otra cosa con esa persona.
¿Qué es lo que más te gusta de una persona cuando la conoces?
Que me hace reír.
¿Red flags de la gente que acabas de conocer?
Tengo una lista interminable. Cuando ves al típico que va de fuck boy, que se encanta a sí mismo… el narcisismo... Esa es una pedazo de red flag.
¿Qué es para ti la fama?
No es algo del todo agradable. Está muy idealizada desde fuera.
¿Fama o dinero?
Dinero y a montones.
Algo que te guste y te dé vergüenza reconocer.
La comida basura, un McDonald's.
¿Qué es para ti la empatía?
Es la capacidad de poder ponerse en la piel del otro desde una distancia y poder escuchar, entender, respetar y cuidar lo que sea que le esté ocurriendo a la otra persona desde ese lugar.
¿Qué opinas de las redes sociales?
Arma de doble filo. Son una herramienta muy guay que te pueden ayudar mucho a llegar a todo el mundo o a dar a conocer una parte de ti que quieres dar a conocer, pero al final somos un escaparate y estamos muy pendientes todo el rato de nuestra imagen y eso no nos permite ser o vivir del todo tranquilos porque estamos atentos a lo que queremos vender de nosotros mismos. Me he dado cuenta de que intento ser muy natural en mis redes sociales para ser muy fiel a mí misma y lo que quiero subir lo subo y punto y me tiene que dar igual lo que vaya a pensar la gente.
¿Te preocupa?
Muchas veces lo paso mal con mis propias redes sociales. De hecho, hice détox de redes sociales hasta de nueve meses y de quitarme las del móvil y de usarlas solo en el ordenador para subir cosas de trabajo. De vez en cuando entro en crisis porque me doy cuenta de que me quita mucho tiempo. Están hechas para engancharse y sin querer te das cuenta de que estás ahí subiendo el dedo sin observar absolutamente nada. Es un montón de información que también le estás dando a tu cerebro y me saturo.
¿La fama crea ansiedad?
Sí, sí. Al final son grandes niveles de exposición. Te invitan al desfile de no sé quién y llegas y hay una marabunta de gente que además le da igual quien seas, pero va a gritar. Ese momento en el que te sientes completamente expuesta me conecta con una parte muy vulnerable de mí misma y me hace sentirme muy pequeña, me siento indefensa. La ansiedad muchas veces viene de cuando tú no te colocas en el lugar que te mereces o en el lugar que sientes que te tienes que colocar y no sabes cómo gestionar la situación.
¿Qué es la censura para ti?
Una putada.
¿Te han censurado alguna vez?
No, y es raro… (se ríe), pero sí que me han criticado mucho lo de los pelos en redes sociales.
¿Por qué? ¿cuál es la crítica?
La crítica son caritas de asco vomitando, me ponen maquinillas de afeitar… ¡Y debates enteros! Todavía recuerdo el primer post que subí de “Élite” anunciando que estaba en el cast y se me veían los pelos… Yo lo tengo tan asumido en mi vida y en mi cuerpo que ni siquiera le había prestado atención. Nunca lo he hecho para provocar ni para ir a la contra de nada, ni para reivindicar nada en concreto, o sea, evidentemente sin querer, pues he empezado una reivindicación, pero siempre ha sido como algo personal, una lucha mía interna no una lucha ante la sociedad. Me di cuenta con 16 años que me estaba depilando solo por ser una mujer y me pareció tan ridícula esa idea que dije ‘no lo hago más’. En invierno me miro al espejo y me veo con todo el vello y me veo igual de preciosa. Se creó un debate enorme, gente que lo criticaba y gente que lo defendía. Incluso los chicos con los que he estado recibían comentarios por muchos amigos suyos en plan de ‘oye, ¿y no te molestan los pelos? Comentarios muy fuertes… Entiendo que todavía no se ha cambiado porque para que se hubiera cambiado tendríamos que estar todas las mujeres con pelo primero para estar iguales y luego a partir de ahí ya que cada una tomase su decisión personal de si se gusta más con o sin vello, pero tendríamos que tener el derecho a no depilarnos y no es así. Desde que tenemos 11 años que nos empieza a crecer el vello estamos todas depilándonos porque asumimos que es lo bello en el cuerpo de una mujer. En la reflexión real, es que en el fondo el cuerpo de la mujer siempre ha sido depilado y el del hombre sin depilar porque ha habido una sexualización del cuerpo de la mujer a través de su infantilización que eso es lo que a mí más me cabrea. El cuerpo femenino en el único momento en el que no tiene pelo es cuando es una niña… ¿qué queréis hacer con nuestro cuerpo? ¿queréis que sea más sexy porque es infantil? No entiendo.
¿Cuál es tu consejo para aquellas personas que sufren rechazo por ser quiénes son?
Me da mucha pena este tema, la verdad que siento que volvemos atrás por momentos. Mi consejo sería que no tengan miedo, que si defienden sus ideales y luchan por lo que quieren ser. Los que hemos tenido que pasar por reivindicar lo que queremos ser o ir a la contra de lo que una sociedad dicta, llega un momento en el que no tenemos miedo a decir lo que queremos decir, a ser quienes queremos ser y gracias a eso te comes el mundo.
¿Has sufrido bullying?
Yo sí.
¿Cómo lo viviste?
No fue un bullying super severo, pero sí que es verdad que fue en 5º de primaria.
Esto es muy fuerte y da para una reflexión. Eran todos los chicos de una clase entera que me hacían bullying y me llamaban “Martina La Pestilente” que es como que olía mal y hacían como que se ponían mascarillas cuando pasaba a su lado, me empujaban por las escaleras, me quitaban la merienda… Y te juro que a día de hoy pienso: ¿Cómo nadie se daba cuenta? Toda una clase entera de niños y nadie se daba cuenta. Un día conseguí contarlo porque al final cuando eres pequeño asumes ciertas cosas que te ocurren en la vida sin querer y entonces se lo conté a mi padre y lo gestionó como supo. No lo juzgo, pero tampoco me dijo nada en especial, me dijo: ‘Eso es porque les gustas a los niños’ y yo me enfadé un montón con ese comentario porque no me estaba enseñando a gestionar lo me estaba pasando. Al año siguiente todos esos niños que me hacían bullying, estaban todos enamorados de mí y literalmente haciendo cola para pedirme salir. ¿Qué estamos haciendo mal? ¿qué les estamos enseñando mal a los niños dentro de la sociedad patriarcal en la que vivimos para que se sepan gestionar tan mal que les gusta alguien? La reflexión a la que yo llegaba es que hay cero capacidad de poder abrirse emocionalmente y tienen que tratar mal a la otra persona que les gusta. Estamos criando “maltratadores”…
Desde pequeños ya escuchamos: “Los que se pelean, se desean” …
Me parecen tan terribles estas frases. Muchas veces he estado en relaciones muy duras, muy tóxicas y muchas veces me preguntaba, pero ¿cómo puede ser que haya acabado en estas relaciones? ¿Cómo no voy a acabar en esas relaciones si esta es la educación que he recibido?
¿Qué es el feminismo?
Descubrí el feminismo cuando tenía 14 años porque en mi colegio empezaron a hacer una cosa que se llamaba el punto violeta. Las niñas más mayores hacían reuniones de mujeres para debatir sobre feminismo. Era muy muy guay. Crearon un colectivo y ahí fue cuando empecé a entender muchas cosas que no había entendido hasta ese momento. Me di cuenta de todas las cosas que había asumido como normales y eran muy machistas. El mayor proceso que he hecho para acercarme al feminismo ha sido deconstruir todo el patriarcado que llevo dentro y crear un pensamiento enfocado hacia la igualdad, hacia priorizarme como mujer y querer ocupar el lugar que me merezco como mujer en todos esos ámbitos de mi vida. Es mi propia lucha.
¿Cómo vives el 8M?
Para mí es un día súper importante en el que hay que salir a la calle a gritar, a luchar y a estar todos a una.
¿Qué le dirías al típico machirulo?
¡Que se peine! Me he peleado tanto con machirulos…Todas mis amigas y yo hemos tenido circunstancias muy feas con hombres. Todas y cada una de las mujeres que conozco en mi vida.
Si te diera un altavoz enorme para hablar a los 8 billones de personas que habitan el planeta, ¿qué dirías?
¡Os quiero zorras!
Juego de asociación:
Feminismo.
Morado.
LGTBIQ+
Arco iris.
Racismo.
Lucha.
Salud mental.
Amor propio.
Amor.
Respeto.
Sexo.
Disfrute.
Traición.
Dolor.
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