Demi Lovato es noticia. Otra vez más. Y otra vez más no es noticia por el gran álbum o por la película o serie que está a punto de estrenar. Demi Lovato es noticia porque tras su reciente salida de rehabilitación nos ha mostrado un tatuaje de una araña negra de considerables dimensiones en el lateral de su cabeza.
A través de su cuenta de Instagram, la ex estrella de Disney publicó varias imágenes de su nuevo tatuaje en su cabeza recién afeitada.
“Fue la abuela araña quien nos enseñó muchas cosas. Nos enseñó sobre alfarería y tejido. Nos enseñó sobre el fuego y la luz y lo oscuro. Ella nos enseñó que todos estamos conectados en la red y que cada uno de nosotros tenemos nuestro lugar en el mundo”, dijo la ex chica Disney.
Lovato se internó en una clínica en Utah hace pocos días para continuar luchando contra sus adicciones que padece desde hace más de una década y que en 2018 se hicieron más notables tras sufrir una sobredosis en LA. Llego al punto en el que su vida pendió de un hilo. Tal y como cuenta en “Demi Lovato: Dancing with the Devil”, la cantante reveló que cuando tuvo la sobredosis, sufrió una agresión sexual por parte del traficante mientras ella se encontraba casi inconsciente. “Cuando me encontraron, estaba desnuda, azul. Me dejaron literalmente muerta después de que él se aprovechó de mí”, reveló la artista. “Me quedé con daño cerebral, y todavía estoy lidiando con los efectos de eso hoy. No conduzco un automóvil porque tengo puntos ciegos en mi visión”, dijo. “Durante mucho tiempo me costó leer. Fue muy importante cuando pude leer un libro, que sucedió como dos meses después porque mi visión estaba muy borrosa. Me enfrenté a muchas consecuencias y siento que todavía están ahí para recordarme lo que podría pasar si alguna vez vuelvo a entrar en un lugar oscuro”, agregó Lovato.
La artista dijo el año pasado en su docuserie que todavía bebía y fumaba marihuana después de su sobredosis, admitiendo que “no es para todos”. Pero el mes pasado anunció que estaba 100% sobria.