INTERVIEW w/ SAM MORELOS: “Soy un chique de 19 años con muchas historias que contar”
- Pablo Aragón Blanco
- 29 may
- 3 Min. de lectura
En esta conversación profunda y auténtica, Sam Morelos (7 de julio de 2005 en Los Ángeles, Estados Unidos), conocide por su participación en That '90s Show y Summer of '69, comparte sus pensamientos sobre la fama, la identidad, el amor y el activismo.
Con los pies puestos en dos mundos (Hollywood y la universidad), y el alma anclada en la empatía, Sam habla con Folie sobre sus montañas rusas emocionales, los rituales que la sostienen y por qué amar (de verdad) sigue siendo su revolución más íntima.

“Como generación sentimos que tenemos que arreglar todo y es abrumador”
NO PARA DE CREAR
“Muchas injusticias nacen de la falta de empatía”
¿Cómo es ser tú?
Me siento muy agradecide por todas las oportunidades que he tenido, pero también me siento abrumadoramente normal. Soy un chique de 19 años con muchas historias que contar y con las mismas inseguridades que cualquier otro joven: procrastino, tengo síndrome del impostor y me cuesta terminar mis ensayos.
¿Cómo es tu rutina como actriz actualmente?
Antes era un caos. Me despertaba 30 minutos antes de clase y salía corriendo. Pero desde que empecé en NYU, he aprendido a cuidar de mi cuerpo como instrumento de trabajo. Hago calentamientos vocales y físicos para “salir del estado peatonal y entrar en modo actor”, como nos enseñan.
¿Qué significó para ti Summer of ‘69?
Fue una experiencia transformadora. Conocí personas increíbles que hoy son como pilares en mi vida. Nos sentíamos como una familia, incluso con el equipo técnico. Siento que soy mejor persona después de esa película.
¿Y trabajar en That 90s Show?
Fue otra familia. Los chicos del elenco somos realmente amigos, aún salimos juntos. Compartimos seis meses de rodaje y eso nos unió profundamente.
¿Quién es tu mayor inspiración?
Me inspira ver a los seres humanos cuidarse unos a otros. Es simple, pero ver actos de conexión humana en lo cotidiano me conmueve profundamente.
¿Con quién te gustaría trabajar?
Andrew Scott. Su profundidad, su técnica, la forma en que trata cada personaje con tanto respeto y humanidad… me inspira muchísimo.
¿En qué proyectos estás trabajando?
Acabo de terminar Regretting You, una adaptación del libro de Colleen Hoover. Mi personaje aporta un poco de ligereza en medio de una historia bastante intensa. Se estrena el 24 de octubre en cines.
¿Qué esperas de tu carrera?
No doy nada por hecho. Solo espero seguir trabajando en historias que me alimenten creativamente… y ojalá poder vivir de ello también.
Resume tu vida en una palabra.
Desaprendizaje (Unlearn).

¿Cuándo te sientes sola?
A veces confundo estar sola con sentirme sola. Estoy trabajando en disfrutar mi propia compañía.
¿Qué te hace feliz?
La naturaleza, la música y las cosas antiguas. Me encanta lo que ha sido amado antes de llegar a mí.
¿Cuándo fue la última vez que lloraste?
El miércoles pasado en terapia. Me di cuenta de que lo que más deseaba de niñe era sentirme escuchade y conocide.
¿Tienes un mantra?
“No persigo, atraigo. Lo que me pertenece, me encontrará”. Me recuerda que lo que no llega a mí, quizá no era para mí.
¿Qué es el amor para ti?
Es una acción, una elección constante. Es trabajo, pero como el de un pintor con su obra: con devoción, pasión y entrega.
¿Fama o dinero?
Dinero. Porque sin él no puedes ni vivir con dignidad ni financiar proyectos creativos como el teatro, que amo y que cuesta mucho.
¿Qué no volverías a hacer nunca?
Estudiar y trabajar al mismo tiempo. Durante Regretting You viajé 12 veces en un mes entre Atlanta y Nueva York. No quiero volver a dividirme así.
¿Tu mayor miedo?
Estancarme. Dejar de crecer y dejar de aprender.
¿Tu meta final?
Estar en paz conmigo misme. Sentirme contente siendo quien soy.
¿Hay alguna causa en la que te gustaría involucrarte más?
En muchas. Pero son tantas que a veces se vuelve paralizante. Como generación, sentimos que tenemos que arreglar todo y es abrumador.
Si pudieras cambiar algo en el mundo, ¿qué sería?
El odio. Creo que muchas injusticias nacen de la falta de empatía. No se trata de que todos vivan como tú; se trata de aceptar la humanidad del otro.
Si pudieras hablarle al mundo entero, ¿qué dirías?
Es mucho más fácil y satisfactorio amarnos unos a otros que poner energía en el odio. ¿Por qué no elegimos el amor?
¿Te consideras libre?
No.
¿Qué es la libertad para ti?
Poder respirar sin miedo. Explorar, equivocarme, vivir sin el juicio constante.