Desde que Alessandro Michele dio la espantada en noviembre de 2022, todos y cada uno de nosotros no hemos parado de preguntarnos porque rumbo iría la maison italiana. Con la llegada de Sabato de Sarno en enero de 2023 (presentará su primera colección en septiembre) nos podemos hacer una idea, pero el desfile del pasado fin de semana era una gran incógnita.
El equipo de diseño de Gucci tomó temporalmente el timón y experimentó con el archivo de la firma. Remezcló ideas de Michele junto al savoir faire de otras agujas de Gucci como Tom Ford y Frida Giannini.
"Una expresión libre fundada en recuerdos colectivos que desdibujan las líneas del tiempo, es una ilustración del corazón palpitante de Gucci: el ecosistema de diseñadores y artesanos cuya comprensión compartida de la Casa se ha transmitido y evolucionado de creativo a creativo durante más de un siglo", rezaban las notas del desfile. "En una exuberante conversación entre pasado y futuro, la colección reflexiona sobre Gucci como una constante cultural y revitaliza la influencia de los visionarios que la encabezaron, allanando el camino para una nueva dimensión de su herencia".
"La silueta recuerda el lenguaje de formas erótico y glamuroso de Gucci de los años 90 y principios de los 2000, pero lo pinta con la paleta de colores eléctricamente suntuosa de los años 2010", añadían las notas del desfile.
El Y2K de Gucci se está agotando en todas las tiendas de segunda mano e incluso en la más que mencionada Vestiaire Collective. Por eso mismo, hemos obtenido lo que sabían que queríamos, en lugar de lo que aún no sabíamos que queríamos. Un ejemplo: las innumerables iteraciones de bolsos alargados con forma de bocado de caballo, una reedición del superventas Borsa It-bag de Tom Ford.
Para los fans de la marca de los últimos tiempos, seguía habiendo muchos elementos básicos de Michelian: abrigos de piel sintética, estilo candy-shop, monogramas brillantes y vestidos de lentejuelas, plumas en abundancia y zapatos de suela peluda.
Tras el desfile, todo el equipo de diseño salió de los ascensores que bordeaban el espacio ante una sala repleta de aplausos y, al verlos, quedó claro lo jóvenes que eran, lo que explica por qué había tantas referencias al Gucci Y2K.
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