top of page
Buscar
  • Foto del escritorPablo Aragón Blanco

INTERVIEW: ESTHER ACEBO: “He vuelto a casa muchas veces sin energía tras rodar ‘LA CASA DE PAPEL’”

“Ninguna ley debería poder estar por encima de la opinión de una mujer sobre su propio cuerpo”

TOM NEWTON

A Esther Acebo (19 de enero de 1983, Madrid) seguramente la conozcas por interpretar al personaje de Estocolmo en la serie internacional “La Casa de Papel” de Netflix, pero ella es mucho más. Es una mujer todoterreno que ya consiguió al público con sus reportajes en “Non Stop People”, unos inicios que forjaron parte de la identidad de Esther. Micro en mano se recorrió las calles, improvisando peldaño a peldaño para conseguir lograr su gran sueño.


Me despertaba una inquietud enorme conocerla más de cerca y cuando la entrevista iba avanzando sentí un profundo deseo de iniciar más y más temas de conversación. Eso no suele ocurrir, pero con ella todo fluía a las mil maravillas. Ansiaba conocer los entresijos de la serie que la hizo tan famosa que incluso en un hospital fue grabada con el móvil mientras le ponían una vía. Hablar sobre la serie que le abrió la puerta a nuevos proyectos como “Jaula” (que se estrena hoy) o su participación en la segunda temporada de “Operación Marea Negra” de Amazon Prime Video, pero también quería conocer a la persona que esconde Esther. Una mujer que habla alta y claro sobre la maternidad, sobre el precio de la fama, sobre la madurez en el cine y sobre ese síndrome del impostor que según ella: “Cualquier persona que se dedique a algo artístico y no lo haya tenido que se siente a tomar un café conmigo”.


UNA FUERZA DE LA NATURALEZA


“Es horrible teñir la maternidad de una especie de perfección y de fantasía”


¿Quién eres? ¿Con qué soñabas de niña?


De pequeños hay gente que no sabe lo que quiere ser de mayor y yo era al revés porque quería ser muchas cosas. Llegué a la interpretación justamente por eso.


Eres presentadora de televisión, reportera, actriz, ¿en qué campo te sientes más cómoda?


Lo que tengo claro es que desde hace mucho tiempo quiero ser actriz y es lo que he ido persiguiendo. Mientras tanto como todo buena actriz o actor tienes que sobrevivir haciendo otras cosas. He tenido la fortuna de poder ir haciendo otras cosas que también han ido enriqueciéndome como actriz. He trabajado como reportera, como presentadora y dando clases de todas las cosas que se te ocurran en la cabeza, pero es verdad que con lo que me siento más cómoda es con la interpretación.


¿Has sido camarera?


No. Ves ahí no cumplo con el cliché. ¡Me falta eso!


¿Qué recuerdas de tu época “Non Stop People”?


Fue una época de mucho aprendizaje, también un poco de conflicto y de sufrimiento porque hacia muchos reportajes en la calle. Fue muy divertido y es muy emocionante, pero obviamente dinero da muy poco y estaba como muy agotada pensando que lo que quería ser es ser actriz.


¿Crees qué eres buena improvisando?


Es una de las cosas buenas que me enseñó “Non Stop People”, el salir a la calle e improvisar y hacer entrevistas. Te hace tener la cabeza muy abierta y muy despierta.


¿Cómo es tu personaje en “Jaula”?


Mi personaje es la típica vecina cotilla que es súper desafortunada en sus comentarios, pero luego piensas que no es mala gente. Es sencilla y bonachona, pero que mete la pata de continuo.


¿Te has inspirado en alguien para hacer el personaje?


La verdad que en ese momento no, pero la verdad es que me ha recordado a una vecina que he conocido después de grabar la serie. Es una vecina que no creo que tenga maldad, pero siempre hace comentarios fuera de lugar. Me hubiese gustado conocerla antes para inspirarme en ella.


¿Te ha gustado hacer terror?


Sí, y es sorprendentemente divertido cuando lo juegas desde dentro.


¿Te has guardado algo del rodaje?


Pues la verdad es que no. No soy mucho de robar cosas. Material no me llevo nada, pero en la cabeza me guardo una escena en la cabeza que era muy seria, un plano muy dramático y me estaba muriendo de la risa. También me pasó lo mismo con Elena Anaya. En ese rodaje tuve muchos ataques de risa.


¿Tampoco te llevaste nada de “La Casa de Papel”?


Sí. Aunque siempre lo he negado, pero ya lo digo. En la primera temporada lo raro es quien no se llevase su mono, salimos todos con la mochila un poco más grande. Al terminar la última temporada que te prometo que no robe nada, al cabo de unas semanas me llegó una caja de Netflix a casa con mi mono… No sabes que llorera me pegué.


¿Qué significa para ti ese gran cambio al hacer “LCDP”? ¿cómo viviste el boom internacional que tuvo?


Con cierto asombro porque me sigue sorprendiendo y al mismo tiempo con mucho agradecimiento porque solo un 2% o un 3% de personas en este país que viven de la profesión y me hace sentirme muy afortunada. Una gratitud absoluta. ¡Qué suerte la mía haber conseguido llegar a esta serie y con este personaje!

¿Qué sacas después de haber formado parte de este gran proyecto? ¿qué has aprendido?


Siempre decía que si me preguntasen esta pregunta diría que aprendí el clásico “mejor pedir perdón que permiso”. Es que yo soy muy correcta y he aprendido que muchas veces hay que tirarse a la piscina y hacer, hacer… Ahora me atrevo mucho más a hacer cosas, sin tanto pedir permiso.


Úrsula Corberó ha sido entrevistada en el show de Jimmy Fallon y es una gran estrella internacional, ¿cómo vives que tus compañeros tengan un gran éxito? ¿cómo lo ves desde fuera?


Entiendo Úrsula es como una especie de personaje inalcanzable para mucha gente, pero para mí es mi compañera con la que he compartido ratos de espera de camerino, risas o un par de noches en Tailandia las dos cagadas de miedo porque había cucarachas. Todos sus éxitos los vivo con mucho orgullo. Cuando empecé a verlo en las redes sociales pensé ¡qué guay que este ahí!


¿Tú serías capaz de enamorarte de tu captor?


Me encantaría decirte que no, pero probablemente sí. Lo que sé es que me puedo enamorar de las personas más inesperadas.


Depende del captor…


Exacto y de como sea el secuestro. Si es una cosa graciosa, claro que sí.


Tu personaje es LCDP, se ve frente al dilema de abortar, ¿cuál es tu opinión al respecto sobre el aborto? Además, es importante tu opinión ya que acabas de ser madre.


Justo en marzo nació mi hija. La verdad es una cosa en la que me manifesté en redes. Prohibir el aborto al final no es prohibir el aborto, va a seguir habiendo abortos. Lo único que hacen es ponerlo mucho más difícil a las personas que no tienen acceso a una seguridad privada y entonces estás generando una diferencia más entre gente que tiene medios y gente que no lo tiene. Nadie absolutamente nadie y desde luego ninguna ley debería poder estar por encima de la opinión de una mujer sobre su propio cuerpo.


¿Cómo haces para que las emociones de tus personajes no influyan en la vida real?


Valoro mucho a la gente que se deja el personaje en el set y se va a su casa feliz. Reconozco que es una cosa que hay que hacer y hago mucho trabajo por ello, pero es muy difícil. Por ejemplo, en LCDP que todas las secuencias eran de una emoción loquísima, he vuelto a casa muchas veces después de rodar sin energía. Un agotamiento emocional. Si he estado llorando porque alguien se va a morir o para que no me muera durante 8 horas es muy difícil quitártelo.


¿Serie favorita que devoras en menos de un día?


No soy yo de darme grandes atracones de series, pero disfrute mucho de “A dos metros bajo tierra”.


¿Has tenido alguna vez esa sensación de querer dejarlo?


Claro que sí. Es una profesión que es muy retadora y muchas veces digo que es una profesión que hay que elegirla todos los días porque cuando tienes mucho trabajo es dura y es muy exigente y además nosotros trabajamos con nuestro propio cuerpo, nuestras emociones y nuestra cara. Estás muy muy expuesta e y eso genera mucho miedo y mucho pánico, pero ojo cuando de repente no hay trabajo y tienes este vértigo de ‘va a llegar al siguiente casting, va a llegar al siguiente personaje’.


¿Te preocupa envejecer en esta profesión?


Es una cosa que esta ahí y negarlo sería negar la evidencia. De repente ves como compañeras de 45 años las llaman para hacer de abuelas o de ves como la parte masculina tiene 40 años y la femenina tiene 20. Sería maravilloso que empezásemos a aceptar que las mujeres también nos hacemos mayores, maduramos, envejecemos y que en la ficción todas las edades tienen cabida. De momento no soy muy consciente de ello, pero me imagino que me va a llegar esta situación muy pronto.

Hay mujeres de todas las edades y cuantas más edades haya en la ficción, más riqueza hay y más gente se siente identificada.


Justo te iba a decir eso. La riqueza de que una mujer de 60 años se puede enamorar y puede vivir un amor precioso en una película y sin embargo, es tan complicado…

Además de este tema, ¿ha habido un gran avance en inclusividad en las series de Tv?

¿crees que refleja a la nueva sociedad?


Hacer el esfuerzo de inclusión es positivo, que se rompan clichés y estereotipos y que haya de repente un abanico más amplio y la sociedad entera se vea reflejada en la ficción.


¿Cómo estás viviendo la maternidad?


Muy bien, pero es muy difícil. El primer mes decía: ¿Cómo la gente hace esto? Las redes sociales en este tema hacen un flaco favor. Es el reto más increíble, más grande por el que he pasado en mi vida, pero la satisfacción es exponencialmente más grande de lo que te puedas incluso imaginar. Es precioso y a la vez es muy duro.


¿Nadie cuenta lo que es ser madre? ¿Qué dirías ahora a todas esas mujeres?


Intentaría ser lo más honesta ya que le hacemos flaco favor a las nuevas mamás al no contarlo. Es horrible teñir la maternidad de una especie de perfección y de fantasía y de sueño que hace que luego muchas mamás vean eso y se sientan frustradas porque pensamos que somos malas madres. Luego te das cuenta que la gente te cuenta un porcentaje muy pequeño de lo que es en realidad, entonces a mis amigos les digo que hay que intentar respirar por la nariz, tener paciencia, llenar la nevera de tuppers, porque de repente no tienes tiempo de nada y tener mucha calma y mucha confianza y mucha fe en que todo pasa. Es duro y está muy lejos de ser algo perfecto, pero es la hostia de bonito.


¿Has tenido el síndrome del impostor alguna vez?


Por supuesto. Cualquier persona que se dedique a algo artístico y no lo haya tenido que se siente a tomar un café conmigo. Muchas veces he pensado: ‘¿en qué momento se van a dar cuenta que tenían que haber cogido a la otra que hizo el casting’? Esa especie de pánico te pone en alerta y hace que le pongas más ganas si cabe.


¿Es bueno tener ego?


Todos tenemos ego. Lo que pasa que hay egos que están bien gestionados y otros mal gestionados. Tienes que conseguir gestionar lo suficientemente bien para soportar en un momento dado una crítica mala o la presión de ser mediático o de que un proyecto se vea mucho o que se vea muy poco, pero que ese ego no esté por delante de ti ni del proyecto ni de tus compañeros.


¿Te preocupa ahora después de dar a luz tu aspecto físico y lo que se comente sobre él?


Durante el embarazo pensé que me iba a preocupar mucho porque hago mucho deporte y llevo una vida muy sana. Pero al dar luz y ver la energía que quita todo, en recuperarte tú y en cuidar al bebé, todo eso ha pasado un nivel de importancia bastante pequeño. Aunque supongo que si de repente estoy en la playa y alguien me hace una foto en un ángulo desafortunado y hay mucha gente comentando seguro que me voy a sentir muy expuesta y muy mal. Habría que utilizarlo todo esto como una reivindicación de que tras dar a luz los cuerpos cambian y no hay que generar prisas ni presión por verse físicamente bien.


¿En algún momento cuando LCDP se convirtió en un éxito quisiste desaparecer? ¿te querías ir a alguna isla desierta y olvidarte del mundo?


Espero que no se malinterprete mi respuesta porque no quiero sonar desagradecida en ningún caso, pero es muy abrumador. Antes de todo aquello actuaba en salas de teatro de 100 personas y de repente salgo a la calle y la gente te dice cosas, te pide fotos, vas caminando y ves que alguien te está haciendo un vídeo… Es verdad que una parte de la fama es bonita porque la gente reconoce tu trabajo y tu trabajo llega a mucha gente y eso es precioso y es una maravilla, pero al mismo tiempo es verdad que te pone muy vulnerable, hay muchos momentos en los que quieras estar sola tranquilamente con tus amigos, con tu pareja o con tu familia pasando desapercibida y es casi imposible. Hay momentos en los que daría al pause, me iría corriendo algún sitio que pudiera estar sola en una pompita y luego volvería con fuerza.


¿Cuál ha sido el más momento más incómodo que te han hecho vivir?


Tuve que ir a urgencias a las 2 de la mañana porque tuve una reacción alérgica. Bueno, porque comí una cosa que me dio mucha alergia y tenía un montón de ronchones por el cuerpo y me picaba mucho. Entonces me tuvieron que meter en un box para inocularme un antihistamínico a través de una vía. En frente había una chica sentada en una silla y la acompañaba a un chico y cuando me estaban poniendo la vía, me hizo un vídeo. Me sentí tan pequeña, tan vulnerable y tan mal…


¿Hay alguna causa social en la que creas que debas participar?


A parte de la del aborto, últimamente también me he hecho bastante eco de la lucha para que dejen de experimentar en animales.


bottom of page