top of page
Buscar
  • Foto del escritorRedacción Folie

JACOB ELORDI bajo el yugo de ser perfecto

El popular actor australiano de ascendencia española, Jacob Elordi, confiesa que la presión sobre su físico le ha afectado negativamente en los rodajes.

CALVIN KLEIN

La carrera de Jacob Elordi es como un cohete que acaba de despegar, tiene un ascenso fulgurante sin parangón. Gracias a su papel de Nate Jacobs en Euphoria y a su imagen de nuevo James Dean es uno de los actores del momento. Tal es su fama que muchos le postulan como el próximo James Bond.

Con 1.96 m. de estatura y un cuerpo apolíneo que bien podría haber sido cincelado por el gran Miguel Ángel, ha conseguido ser un referente estético. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce y según el actor ha vivido una presión social sobre su cuerpo: "Tienes a todas las personas de todas las edades hablando de tu aspecto físico. Recrearte en la vanidad del cuerpo es algo bastante problemático porque es algo que va a deteriorarse con el tiempo", ha confesado en una entrevista para Men' s Health.


Pero no es la primera vez que el artista habla sobre como se ha visto acosado por este tema. Cuando tan solo tenía 20 años dio el gran salto al estrellato por su interpretación de Noah Flynn en la popular saga Kissing Booth. En aquel momento su físico también entraba a escena en cada uno de los fotogramas. Ante eso, el actor estaba más pendiente de verse bien en la pantalla que en su interpretación. Todo ello le llevó a vivir por y para el cuerpo. Tal fue la obsesión que en algunas ocasiones duplicaba su dosis diaria de entrenamiento con el fin de cumplir las expectativas absurdas que se habían puesto sobre él y que él mismo había normalizado. Ahora su torso y abdominales han dejado de entrar a debate.

bottom of page