Zac Efron también ha querido reflexionar sobre el duro entrenamiento al que se sometió para hacer de súper vigilante de la playa en la película de 2017 Baywatch. Con sus declaraciones ha revelado que para “estar guapo hay que sufrir”, en su caso más de la cuenta.
La estrella de “The Greatest Showman” reflexionó sobre su intensa transformación corporal para la película y cómo su estricta dieta y rutina de ejercicios terminaron por pasarle una seria factura mental y física a su salud.
"Empecé a desarrollar insomnio y caí en una depresión bastante fuerte durante mucho tiempo", dijo Efron a Men's Health. "Algo de esa experiencia me quemó. Me costó mucho volver a centrarme".
Efron continuó reconociendo que su físico de película no es realmente "alcanzable" en el mundo real. "Hay muy poca agua en la piel. Es falso, parece una película de animación", explicó. "Y eso requería Lasix, potentes diuréticos, para conseguirlo. Así que no necesito hacerlo. Prefiero tener un extra, ya sabes, de 2 a 3 por ciento de grasa corporal".
Aunque no es la primera vez que habla sobre ello. En el pasado, durante un episodio de Hot Ones en 2020, Efron reveló que no "quería volver a estar en tan buena forma".
"Realmente, es como, fue muy duro. Trabajas sin margen de maniobra. Tienes agua bajo la piel y te preocupas por convertir tu six-pack en un four-pack", dijo al presentador Sean Evans. "Es una estupidez. No es real. Estoy contento de que haya funcionado y de que me haya servido para superarlo. Puede que lo vuelva a hacer si fuera algo que valiera la pena, pero esperaría a que llegara a eso. Me puse muy grande y cachas para esa película, pero no quiero que la gente piense que esa es la mejor manera de estar”.
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